[vc_row][vc_column][vc_column_text]Estar comprometido con tu trabajo y querer hacerlo lo mejor posible es una cosa. Pero cuando se convierte en el centro de tu vida puede que tengas un problema. Veamos cómo reconocer si eres adicto al trabajo, los problemas derivados y qué hacer al respecto.
Señales de que eres adicto al trabajo
Hay una serie de indicios de que eres más que un trabajador comprometido. Las siguientes señales te indican si te has convertido en un adicto al trabajo.
El trabajo es el centro de tu vida
Tu trabajo se ha convertido en lo más importante. Cualquier otro compromiso o actividad son menos importantes. Los aplazas porque porque tu trabajo tiene prioridad y siempre tienes algo que hacer.
Te necesitan en el trabajo porque la empresa se desmoronaría sin ti. Al fin y al cabo nadie sabe hacer el trabajo tan bien como tú. Por eso te sobrecargas de trabajo y no sabes delegar.
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No sabes desconectar y descansar
¿Cómo vas a descansar si tienes tanto trabajo y tantos temas importantes que resolver? Siempre encuentras una excusa para seguir trabajando o al menos pensando en el trabajo. Lo de descansar es para otros. A ti no te hace falta. ¿Vacaciones? Será un invento para gente que no está tan comprometida con su trabajo como tú. Porque tú no tienes tiempo.
Eres el primero en llegar al trabajo y el último en irse. Después de todo, alguien tiene que sacar el trabajo adelante. Trabajas jornadas maratonianas y aún así crees que no es suficiente. Las comidas son un mal necesario. Comes algo rápido mientras sigues trabajando sin descansar.
Estás conectado a todas horas
Aún después de una larga jornada de trabajo, sigues consultando y contestando al correo. Estás disponible para la empresa cualquier día a cualquier hora. Tu peor pesadilla es quedarte sin batería en el móvil o sin conexión de internet.
Tu casa se ha convertido en tu segunda oficina
Durante las comidas con tu familia sigues pendiente del móvil por si entra algún correo importante. O puedes que aproveches para leer algún informe prioritario. Las actividades en familia parecen un estorbo porque tienes cosas más importantes que hacer; preparar una presentación, un informe o lo que sea. Con la excusa de no tener tiempo te refugias en tu trabajo.
¿Crees que si no lo haces tú nadie va a sacar el trabajo adelante? ¿No tienes tiempo para #desconectar y #descansar? Tal vez seas #adictoaltrabajo Clic para tuitear
Te defines por tu trabajo
Tu vida se centra en tu trabajo. Te defines por lo importante que es tu trabajo y lo comprometido que eres como trabajador. Tus conversaciones giran en torno a tu empresa y tu trabajo. Ya no tienes otros temas de conversación porque además lo demás es superfluo.
Te defines por lo ocupado que estás
Crees que eres la persona más ocupada del mundo. Los demás no parecen entender lo importante que es tu trabajo. No parecen comprender que la empresa no podría sobrevivir sin ti. Si deberían entender que tus compromisos laborales tienen prioridad ante cualquier otro asunto.
¿Tus conversaciones solo giran en torno a tu #trabajo y lo #ocupado que estás? Puede que seas #adictoaltrabajo Clic para tuitear
No sabes decir que no
Por más trabajo que tienes, no se te ocurriría en la vida rechazar otro encargo a tu jefe. “No puedo” y “no sé” no forman parte de tu vocabulario. Además a un jefe no se le puede decir que no.
Vida social… ¿para qué?
Tu vida social es prácticamente inexistente, a no ser que contemos las reuniones y los eventos de trabajo. Con tanto trabajo que tienes, no tienes tiempo para hacer actividades con tu familia o quedar con tus amigos. Lo raro es que no parecen entender por qué no tienes tiempo y les parece sentar mal a veces que no puedas estar con ellos.
Por eso tu círculo de buenos amigos es muy reducido. Probablemente sea formado por otras personas tan comprometidas, léase adictos al trabajo como tú. Estos y tus amigos del trabajo entienden mejor tu situación. Eso sí, si cambiaras de trabajo ¿cuántos amigos te quedarían?
Tomas tu relación de pareja por sentado
Tienes a tu pareja descuidada porque no tienes tiempo para pasar ratos juntos. Cuando estás en casa sigues trabajando. Se te ha olvidado que hay que nutrir las relaciones y que puede que se le acabe la paciencia a tu pareja un día de estos.
Síntomas y problemas derivados de la adicción al trabajo
Además de las señales mencionadas puedes reconocer que eres adicto al trabajo por una serie de síntomas cognitivos, conductuales y fisiológicos. Sueles estar ansioso, irritable y preocupado. Sientes la necesidad de controlar todo y planificas de forma que tu agenda está más repleta que la del presidente del gobierno. Sufres de estrés constante y puede que tengas insomnio.
Todo ello perjudicará tu salud antes o después. Tienes todas las papeletas para sufrir una úlcera o un íctus. Tu peor pesadilla sería ser despedido del trabajo. Entonces tu mundo se desmoronaría. Ya no sabrías qué hacer contigo mismo y probablemente caerías en una profunda depresión.
Además te encontrarías seguramente con poco apoyo porque casi no te quedan amigos a los que recurrir.
#Estrés constante, irritabilidad, #ansiedad son solo algunos síntomas de la #adicciónaltrabajo. Otros síntomas y problemas. #adictoaltrabajo Clic para tuitear
Cómo salir del círculo vicioso de ser un adicto al trabajo
La adicción al trabajo es comparable a los impulsos y comportamientos compulsivos de otras adicciones. Creemos no poder estar sin nuestro “chute”. ¿Cómo puedes entonces escapar de este círculo vicioso en el que te has metido?
Date cuenta y decídete
El primer paso es obviamente darte cuenta de que tienes un problema. Luego deberás tomar la determinación de querer resolverlo.
Reflexiona sobre las causas
Después te sugiero que reflexiones qué te ha llevado al extremo de volverte adicto al trabajo. ¿Es el miedo a perder tu trabajo viendo lo inestable que es el mundo laboral? ¿Puede que te hayas refugiado en el trabajo por no enfrentarte a otros problemas e inquietudes personales?
Tal vez simplemente empezaste como una persona comprometida y apasionada por su trabajo que poco a poco ha inclinado la balanza hacia el trabajo descuidando cada vez más la vida privada.
Revisa tus prioridades
El siguiente paso es reflexionar sobre qué te importa más en la vida. Puede que tu trabajo esté entre tus prioridades. Pero probablemente te des cuenta que hay otras cosas que te importan mucho: tu familia, tus amigos, tu bienestar, tus intereses y pasatiempos, tu desarrollo personal etc.
¿Eres adicto al trabajo? El primer paso es darte cuenta. Averigua cómo salir de ese círculo vicioso. #adictoaltrabajo Clic para tuitear
Revisa tu planificación
Sugiero que tomes tu agenda y tus listas de tareas. Revisa cuáles son los asuntos realmente prioritarios y productivos. Luego resérvate a conciencia huecos para comidas y descansos. Elige un deporte o una actividad física que te guste y agéndala como si fuera una reunión. Haz lo mismo para actividades con tu familia y amigos. Es decir, resérvate huecos para actividades no relacionadas con el trabajo para obligarte a recuperar tu vida privada. Además, en estos ratos olvídate del trabajo y no consultes el móvil aunque te cueste.
Recupera tu vida social
El humano es un animal social. Necesitamos el contacto humano y el apoyo de nuestra “tribu”. Pero las relaciones hay cuidar y cultivarlas. Por eso piensa cuáles son las personas importantes de tu vida y reconstruye tu relación ellos.
Los mejores trabajadores no trabajan más sino mejor
Asimismo hace falta que cambies tu mentalidad y visión sobre el trabajo. Date cuenta que los mejores profesionales y las personas más productivas no son las que más horas trabajan. Son las que saben priorizar y dedicar sus esfuerzos a lo realmente importante.
Las personas más productivas tienen claras sus prioridades y saben cuidar el equilibrio entre trabajo y vida personal. Saben que el tiempo es limitado y el trabajo nunca se acaba. Pero también saben que solo tenemos un cuerpo y hay que cuidarlo para rendir bien. Por eso son asertivos, saben evaluar los compromisos y encargos antes de aceptarlos y saben decir que no cuando hace falta. También saben delegar tareas a otros.
¿Tienes tanto #trabajo que haces jornadas maratonianas pero crees que no es suficiente? No trabajes más sino mejor. #adictoaltrabajo Clic para tuitear
Busca ayuda profesional
Si no eres capaz de salirte de la adicción al trabajo por tu cuenta, no te sientas avergonzado por buscar ayuda profesional. Un psicólogo, terapeuta o coach pueden ayudarte facilitándote herramientas y enseñándote el camino para salir de tu círculo vicioso.
¿Eres adicto al trabajo?
¿Te has reconocido en las señales? ¿O has reconocido a alguien de tu entorno? ¿Qué efectos tiene sobre tu o su vida y salud? ¿Estás dispuesto a salir del círculo vicioso y cómo lo vas a hacer?
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